jueves, 23 de octubre de 2008

Dale un poco de magia

Dicen que la magia no existe, que es un cuento para niños o bien un elemento al cual aferrarse en momentos críticos para poder salir adelante.
Sin embargo ayer el universo hizo una excepción, solo un ratito, e inundó durante dos horas y cuarto el Palau Sant Jordi con un poco de magia.
Ayer por la noche a las 21.25 un microondas hizo "clink" y de su interior un bol de palomitas fue extraído. Dos minutos mas tarde un gran sillón de cuero negro fue orientado hacia Barcelona y así Freddie Mercury se dispuso a ver a sus amigos volver a las andadas.
Mientras se atiborraba de palomitas no pudo evitar una ligera sonrisa, el público se encontraba eufórico, entregado y totalmente extasiado hacia la banda, al menos sus antiguos compañeros le habían hecho caso en algo y habían continuado el show.
De repente no pudo evitar un escalofrío en su espinazo, pues el público había empezado a corear su nombre con auténtica devoción.
No se lo pensó dos veces y, después de sacudirse las migas de la pechera, saltó del sillón se dirigió al lugar donde estaba celebrándose el concierto. Sabía cual era la única manera de que la gente pudiera sentirlo, pues esto de estar en el barrio de los incorpóreos dificulta un poco que te puedan ver, y raudamente se introdujo en la pantalla gigante de la sala.
Hacía rato que banda y público estaban entregados en un deleite colectivo, lo demostraban los gritos incesables del público, pero de repente algo ocurrió; En un instante el público enmudeció y la silueta de Freddie apareció ante todo el mundo, haciendo lo que mejor sabe; actuar.
Decidió cantar una canción conocida por todos, canción que ha acompañado a mucha gente durante toda su vida, canción cuyo signficado nunca ha sido descifrado por nadie, canción conocida como Bohemian Rhapsody.
La alegría del público alcanzó un nuevo nivel, un nivel que no se puede expresiar mediante la risa, sinó mediante la lágrima mientras se fuerzan todas las cuerdas vocales intentando gritar lo mas fuerte posible y unir la voz al coro multitudinario.
Freddie se sentia pícaramente culpable, pues había sumido al público en un extásis del cual parecía imposible salir. Así que, mientras volvía hacia su casa, susurró con delicadeza a la par que con potencia, a sus antiguos compañeros de banda: Venga señores, ya sabeis que hay que hacer.
Acto seguido, el rock volvió al lugar de encuentro y los gritos reanudaron su estruendo, el concierto seguía.
Freddie estaba satisfecho, hacia tiempo que no estiraba las piernas, además tantas palomitas le estaban haciendo dando una bonita curvita de felicidad, así que hizo un gran sprint para volver a su casa. Una vez allí, en su sillón favorito acabando con su bol de palomitas (el último, después de esto ya empezará con el régimen) continuó viendo el concierto.
La verdad es que hacía tiempo que un concierto de este tipo no se daba. Pero seguro que él podía mejorarlo!

sábado, 18 de octubre de 2008

Conversiones? Prefiero darle yo al Start

En 2001 mi tío me puso en su pc un juego que, según él, me gustaría bastante. Así pues, luces apagadas, volumen alto y yo delante de los controles me dispuse a probarlo.
A primera instancia el juego me cautivó; guión digno de una película de cine negro, acción por doquier y un elemento innovador en esa época, pues llevaba consigo la opción de ralentizar el tiempo para poder apuntar a los enemigos más rápidamente y poder acabar con ellos de una manera espectacular. Dicho efecto pudimos verlo dos años antes en la película “The Matrix” y era la primera vez que se implementaba en un juego. Efectivamente estamos hablando de Max Payne, un buen ejemplo que nos muestra que si se puede combinar un buen juego, con elementos innovadores, con una historia espectacular.
Es sabido que el mundo de los videojuegos está teniendo mas fuerza cada día en nuestra sociedad, y un ejemplo de ello es mirar la cartelera de los últimos diez años y ver la multitud de conversiones que se han hecho del mundo virtual al real, número que poco a poco va en aumento.
La pregunta que entonces me hago es… ¿Por qué?
Aviso que yo no entiendo mucho de cómo hacer una película, pero cuando se trata de una película basada en un juego… ¿no deberían jugar antes con él y saber como podrían enfocar la película?
Generalmente cuando se hace una película basada en un juego suele pasar como con los libros, siempre suele gustar más el libro o el juego que la propia película. En el caso de los libros porque somos nosotros quienes hacemos en nuestra mente el mundo que nos describe su autor y pocas veces el cine superará a nuestra mente. Pero… en el caso de los juegos… no hay nada que imaginar; solo tienes que darle al “on” en tu consola y dejar que las secuencias pasen por si solas.
Entonces… ¿por qué la mayoría de películas basadas en juegos suelen ser bazofias sin sentido? Películas como: Alone in the dark, House of the Dead, Street Fighter, Resident Evil, Super Mario Bros, Hitman, Mortal Kombat, Doom y la última estrenada en nuestras carteleras, Max Payne.
Partimos de la base que cuando se hace una película basada en un juego va dirigida a una minoría, la minoría de la población mundial que ha jugado, conoce el juego y, por lo tanto irá a ver la película. Esto nos reduce mucho el campo de beneficios. Entonces, para que la película no sea un fracaso y vayan a verla tanto conocedores del juego como no, y que guste a todos, los creadores deciden abrir una línea paralela al juego y explicar una historia que pueda ser entendida por todos, no solo para los cuatro “frikies” que se conocen el juego de “pe a pa”.
Aquí es cuando empiezan los problemas, cambios de guiones, cambios de personajes, elementos que no se ven para nada en los juegos, elementos que no se entienden porqué están en la película pero como en el juego salía pues se ponen, personajes que tienen una mínima participación en el juego se ven de protagonistas, o antagonistas, en la película (o viceversa).
¿Que nos queda entonces? Una mezcla de imágenes sin sentido que poco tienen que ver como el juego original y una película muy floja para una persona que simplemente haya ido a verla porqué le ha llamado la atención su sinopsis. Quizás solo podríamos salvar la película Silent Hill, en mi opinión la mejor conversión de juego a cine, y que ha sabido combinar todos los ingredientes haciendo de ella una película que gustará, no a todos evidentemente, tanto a conocedores del juego como a los que nunca habían oído su nombre anteriormente.
¿Conclusión? Intentan vender un producto de calidad, sobretodo dirigido a los jugadores del juego en cuestión, que picamos como salmonetes porque vemos como uno de nuestros juegos favoritos, en mi caso Max Payne, una película que llevaba esperando siete años a que se realizase y a media que vamos viendo el metraje nos entran ganas de llorar de impotencia al ver como uno de nuestros mitos es echado abajo y enterrado en lo mas profundo de la miseria del cine.
Así que… directores a vuestras direcciones, seguid haciendo buenas películas como Full Metal Jacket, PulpFiction, Aliens, Seven, Heat, 2001, Stalingrado, Philadelphia, The Dark Knight, Al final de la escalera, Ciudadano Kane… y dejad a los que saben hacer videojuegos sigan realizando pequeñas obras de arte. Gracias.

viernes, 3 de octubre de 2008

Alumnos y Profesores. Enemigos Íntimos?

Según el profesor Anthony Giddens, cuando habla de procesos sociológicos, el mero hecho de tomar un café es ya un ritual en si mismo. Tomamos café para estar despiertos por la mañana y así estar preparados para nuestra rutina diaria. También lo podemos tomar como parte de una "ceremonia" como la de quedar con unos amigos para tomar un café, con lo que el mero hecho de tomar un café queda relegado a segundo plano ya que lo principal es estar con esas personas.
Pues en una de estas "ceremonias", esta noche con mis amigos de curro, café en mano, ha surgido un tema interesante.
Generalmente cuando decimos la palabra "Profesor", ésta suele ir asociada a la figura de alguien riguroso, imponente, lejano e incluso a veces como la de un énemigo que nos ha puesto el sistema para hacernos la vida imposible.
Es cierto que parte de los profesores hacen su trabajo de 9 a 17 y una vez acabada la faena, a casa que tengo cosas que hacer. Un oficio mas.
Sin embargo, otra parte de los mismos se toman su oficio muy en serio, buscando la mejor forma de estimular al alumno, intentando sacar lo máximo de cada uno...
En este contexto, pregunto... ¿Es realmente raro que haya una relación, en términos extraescolares, entre profesor y alumno?
Cojamos a alumnos de segundo ciclo de ESO, concretamente de 4º de ESO. Estamos hablando de alumnos de 15-16 años (15 en su mayoría). Sabemos que el 90%, tanto alumnos "empollones" como "rebeldes", tienen como el profesor como una figura lejana y a la vez se ponen a la defensiva ante cualquier acción del mismo.
Pero podríamos hablar del 10% que queda, el cual no solo no ve al profesor como una figura lejana sino todo lo contrario, pues estamos hablando de una persona que está trabajando en algo que le gusta y está transmitiendo sus conocimientos, entonces... ¿porqué no puede haber una relación entre alumno y profesor más allá de la escolar?
Pongamos, por ejemplo, que un alumno le interesa enormemente el tema que está explicando el profesor en el aula, interactua en clase, debate al profesor, y al acabar la clase, le sigue preguntanto por el tema en cuestión. De mutuo acuerdo, porque tienen tiempo después de la clase, deciden ir al café de la esquina y acabar de debatir la cuestión.
Es posible que de ahí nazca una relación de amistad entre dos personas interesadas por la mismos intereses (valga la redondancia) y conlleve a que ambos acaben como buenos amigos.
Vuelvo a la pregunta de antes: ¿Habría algún problema en que profesor y alumno tuviesen una relación más allá de la estrictamente "escolar"?
La respuesta está en el aire, y hay multitud de opiniones al respecto. Cierto que todos pensamos en un principio... "uy... malo malo malo, aquí pasa algo raro" y, evidentemente entra el tema sexual en juego, porque, según la "sociedad" ¿Qué relación puede tener una persona de 35 años con una de 15?
Y si ya hablamos de relación profesor-alumna, profesora-alumno, la cosa se pone mucho mas peliaguda, y la cama tiene que aparecer por narices.
También podríamos decir que en el fondo son dos personas, quitando los rangos y edades, que están entablando conversación y amistad. ¿Que surge una amistad? Perfecto. Ahora el problema radica en saber separar lo profesional de lo personal y saber en que momento se pueden decir que cosas y en que momento callar. Si nos fijamos es el mismo caso que la relación entre empleado-jefe, solo que en menor edad.
Y eso es todo... acabar por darle las gracias a mi amiga Núria R por el interesante debate de esta noche. Amén del cachondeo con todos los compañeros de trabajo!!!

Xavi busca blog.

Ultimamente se ha puesto de moda que cada uno de su opinión sobre cualquier tema sin importar lo que se sepa en cuestión del asunto. No hace falta decir que esta efervescencia de opiniones en masa es producto de las nuevas tecnologias, de Internet... pero sobretodo el principal factor es el del anonimato. Como decían en cierta película "Es como una cálida manta en una fría noche invernal".
Es tan fácil hablar cuando es seguro que nadie podrá reconocerte ni saber quien eres que ya no importan ni las formas ni la educación. Simplemente echad un vistazo, por ejemplo, a alguno de los comentarios de videos de youtube para ver lo que estoy diciendo, como éste:
http://www.youtube.com/watch?v=geDErPTC8j0

Sobran las palabras...
Pero bueno... donde quiero llegar con esto? Pues que ultimamente, supongo que será por aburrimiento, frikismo o por mi condición de futuro sociologo (esperemos) pero muchas veces me apetece escribir sobre algo, dar mi opinión también. El tema? Cualquiera puede ser valido; desde el último entramado de Gran Hermano con la expulsión del amigo Germán, hasta el debatir en que punto Joyce con su Stream of consciousness llega a expresar todos los pensamientos tal y como lo haríamos nosotros, pasando por el carácter altamente sexual que puede tener la canción "Superfly Sister" de Michael Jackson.
No quiero con esto pecar de vanidad y petulancia, Chuk Norris me libre, pues aquí no hay ni cultos ni incultos. Partimos de la base que desde hace tiempo que quiero escribir, y para que estos escritos queden en el rincón mas perdido de mi pc, pues helos aquí para que puedan ser leídos (por quien no tenga nada mejor que hacer, claro), y comentados libremente. Ojo, puedo ser todo lo politicamente correcto que queráis, pero también se cagarme en los muertos de quien sea, como he dicho... todos estamos bajo la misma cálida manta.

Un abrazo!